miércoles

Recordé tarde que siempre he temido su ausencia. Que el mundo jamás ha estado tan vacío sin la rutina de su piel, monótona y constante.
Que creo que a fuerza de tenerla cerca se me ha olvidado como retenerla conmigo si amenaza con marcharse, y que si se va durante un instante olvido su voz...
Concluyo entonces que no estoy enamorado, sino que tengo amnesia y egoísmo a partes iguales, que no dejo de  pensar que son mías sus caricias y cada milímetro de espalda que ocupan sus lunares.
Que lo mío, sea como sea, es llevar su sabor en los labios.
He aprendido a olvidar lo que es la existencia sin su nombre, porque no solo la quiero sino que soy el loco que más veces se enamora cada vez que la ve.
Que llevo ya mil lunas buscando mi mirada en su vestido y cuando la encuentro, la dejo de nuevo marchar.

PARA ANA.

5 comentarios:

Lorena dijo...

Por dios, que triste me he puesto... Pero me ha gustado.
Un besito!

Adriana Potter♥ dijo...

Preciosa la entrada, pero muy triste
Un beso

Madrilenials dijo...

Love it.
"Soy el loco que más veces se enamora cada vez que la ve"

Uoo.

Losbichos.

carmeloti dijo...

Sublime, declaración afortunada donde la piel y el sentimiento conjugan a la perfección, que es ese extraño ser que habita en nosotros sin hacer grandes heridas y deja cicatrices que no se irán jamás, ni la locura hará de nosotros imagen reflejo de aquello que llevamos escrito en nuestra vida...

Killian Lovecraft dijo...

Me ha encantado.
(:
"Que lo mío, sea como sea, es llevar su sabor en los labios."
Cito ésta especialmente.